miércoles, 18 de abril de 2012

Omega Seamaster Ploprof

Es el diver más extremo de la manufactura Omega. El Seamaster Ploprof es una reedición del mítico reloj de buceo de los 70 en la que se ha respetado el diseño original actualizando su calibre y duplicando su estanqueidad.


El Seamaster Ploprof es un reloj diseñado para un uso profesional. No es un diver elegante como el 300M ni pretende serlo, pero si es cierto que el contundente tamaño de su caja de 55 x 48 milímetros encaja muy bien con las tendencias actuales. No es un reloj incómodo, pero desde luego no es apto para todas las muñecas. Se mantiene el diseño general del Ploprof original, con el dial en color negro y el pulsador en la derecha que bloquea el giro del bisel. Tanto el accionamiento del bisel como el del citado pulsador es suave y preciso. Las agujas, índices e indicadores del bisel tienen uno de los mejores tratamientos de superluminova que he visto, alumbrando con una intensidad inusual. El cristal del reloj y el del bisel son de zafiro. La estaqueidad de la caja es de 1.200 metros y el fondo lleva el clásico hipocampo de Omega. El Ploprof se puede adquirir con correa de caucho en color negro o naranja, o un armis tipo milanesa que potencia su estética vintage, todos con un cierre de acero con extensión para traje de buceo. Esta reedición añade una nueva versión con dial y bisel blancos, con caucho a juego o con milanesa. Como la mayoría de divers que soportan grandes profundidades, viene equipado con válvula de helio para evitar que el reloj se dañe en una cámara de descompresión. Llama la atención el detalle de la corona a las 9 en vez de a las 6. Es de agradecer, ya que su enorme tamaño lo convertiría en un reloj incómodo de estar situada en su lugar tradicional.


Para redondear esta espectacular reedición, Omega ha optado por utilizar su reciente calibre manufactura 8.500, automático con remonte manual y una reserva de marcha de 60 horas. El fechador está situado entre las 4 y las 5. El único defecto que le podemos poner a esta maquinaria es que no tiene pase rápido de fecha, sino que la aguja horaria da saltos de 1 hora, de forma que tenemos que ir adelantando cada día en 24 saltos hasta ajustarlo completamente. La justificación de Omega es que este sistema evita que estropeemos el mecanismo del cambio de fecha (en la mayoría de maquinarias, si se cambia el día entre las 21:00 y las 3:00 se corre el riesgo de dañar el mecanismo dejando de funcionar).


La presentación del reloj está muy cuidada. En vez de optar por la genérica caja roja de Omega, el Ploprof viene en un estuche de neopreno muy atractivo y deportivo que se cierra con una cremallera. Sin duda este es un diver a tener en cuenta, es técnicamente una maravilla, y mantiene ese espíritu de innovación de los relojes de buceo de los años 70 en su diseño, destacando sus preciosas agujas de espada en distintos colores que se leen con mucha facilidad. Este Seamaster tiene un precio de venta de 6.910 euros.

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